El señor Wilfredo Gómez envió un mensaje por medio de WhatsApp desde Madriz, Nicaragua, y preguntó lo siguiente:
¿Quiero saber si el cloro que se usa para blanquear la ropa se puede usar para purificar el agua de tomar?
22-11, 90. Efectivamente, el cloro o lejía que se usa para blanquear la ropa también puede usarse para purificar el agua, siempre y cuando se tengan algunos cuidados y se use de la manera correcta.
El cloro se forma combinando agua con un compuesto químico llamado hipoclorito de sodio. Esta mezcla generalmente se usa para limpiar y desinfectar las superficies y para lavar y blanquear la ropa. Pero, también puede agregarse al agua para hacerla potable, porque mata los microbios que causan enfermedades como, por ejemplo, el cólera y la fiebre tifoidea. Se debe usar de alguna marca reconocida, y no del que se vende en algunos lugares a granel, porque puede haber sido adulterado. No debe usarse cloro del que se le agrega algún aromatizante para que tenga buen olor.
Además, hay que tener mucho cuidado con la cantidad que se usa, porque si se agrega en exceso puede ser dañino para la salud, ya que puede irritar el sistema respiratorio y la piel, y causar náuseas y vómitos.
¿Cuánto se debe usar?
La cantidad de cloro que se le debe agregar al agua va a depender de su concentración. En la etiqueta del producto siempre viene indicada la concentración. Si se usa cloro al 3.5 por ciento (3.5%) se pone una gota por litro de agua. Si se usa cloro al 5 por ciento (5%) se recomienda agregar sólo media gota.
Para medir bien la cantidad de cloro puede usar un gotero de los que se consiguen en las farmacias. Después de mezclar el agua con el cloro, se tapa y se deben esperar al menos 30 minutos antes de consumirla.
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